Al criarme en un hogar con alcoholismo, viví diariamente en medio de la inestabilidad y la inseguridad. A diferencia de los niños que se criaron escuchando que alguien con los brazos abiertos les decía que los amaba «hasta la luna y de regreso», o «así de grande», yo le preguntaba a mi madre «¿me amas hoy?», solo para ver que me respondía encogiendo los hombros y diciendo: «Eh, lo mismo de siempre». Murió cuando yo tenía 15 años y nunca obtuve una respuesta diferente.
Cuando la bebida de mi hijo se salió de control, rebatí con toda la furia que no había expresado en mi niñez. Sermoneé, castigué y negocié con Dios. Buscaba en la habitación de mi hijo; husmeaba en sus cajones, armario y automóvil; rebuscaba en sus bolsillos; lo ponía a prueba y trataba de oler su aliento cuando se acercaba. Lo engatusaba, lo menospreciaba y lo amenazaba. Él mentía, robaba y se refugiaba en su habitación. Estaba enojado y me excluyó por completo. Parecía que lo había perdido. Solo cuando me di cuenta de que me estaba perdiendo a mí misma, las cosas empezaron a cambiar.
En Al‑Anon, aprendí a empezar a cuidarme y amarme. El progreso fue lento al principio porque pensé que no era digna de amor. Sentía que había fallado como hija y como madre. Pero a medida que me volvía más consciente de cómo le transferí dolor a mi hijo a través de mi comportamiento, comencé a cambiar, a retroceder y dejarle tener la dignidad y la autodeterminación a las que tiene derecho.
Recientemente, mi hijo me dijo que había probado la heroína hace varios meses. Esperó mi respuesta. Esperé a mi Poder Superior. En lugar de estar enojada, molesta o herida, lo miré a los ojos y vi a mi pequeño, a mi hijo. Me escuché a mí misma decir: «Gracias por compartir eso. Gracias por confiar en mí. Te amo. Siempre te he amado y siempre te amaré».
Antes de Al‑Anon, nunca hubiera podido escuchar que lo que realmente estaba diciendo era: «¿Me amas hoy?».
Por Deirdre B., Nueva York
The Forum, noviembre de 2022
Puede reimprimir este artículo en el sitio web de su rama de servicio o en su boletín, junto con la nota de reconocimiento siguiente: Reimpreso con el permiso de The Forum, Al-Anon Family Group Headquarters, Inc., Virginia Beach, Virginia.